|
Con el fonendo en la mochila |
En la era de la globalización, con la facilidad para viajar a otros países, conocer nuevas culturas y distintas situaciones socio-sanitarias, nace esta sección con el objetivo de dar a conocer las experiencias de residentes de Pediatría, que han salido del país para ampliar sus conocimientos médicos en un contexto diferente al nuestro. Una herramienta de ayuda para todos aquellos que se planteen realizar algo similar. |
Pediatr Integral 2023; XXVII (6): 350.e5 – 350.e6
Información del rotante
• Nombre: Paula Rodríguez Molino.
• Email: paularmolino@gmail.com.
• Hospital de Origen: Hospital Universitario La Paz. Madrid.
• Subespecialidad pediátrica: Infectología Pediátrica.
• Año de residencia en el que se realizó la rotación externa (si aplicable): realicé la estancia 4 meses después de acabar la residencia.
• Duración de la rotación externa o del fellowship: 8 meses
Cuestionario
1. ¿Dónde has realizado tu rotación/fellowship? ¿Por qué elegiste ese hospital?
Realicé mi estancia en el Nationwide Children’s Hospital, en Columbus, Ohio (EE.UU.). Inicialmente, iba a realizar esta rotación durante mi 4º año de residencia, pero debido a la pandemia por COVID tuve que suspenderlo. Elegí este hospital, porque quería mejorar mi formación en investigación en un hospital pediátrico de alto nivel en Infectología Pediátrica. Mi intención era incorporarme al equipo del Dr. Ramilo y la Dra. Mejías, para así poder adquirir competencias básicas de laboratorio, diseño y ejecución de estudios, todo ello compaginado con una importante parte asistencial, lo que supone la combinación perfecta.
2. ¿Cómo conseguiste la rotación? ¿Qué documentos o trámites tuviste que realizar?
Cuando solicité mi rotación para ir 2 meses durante mi R4, únicamente tuve que contactar con los encargados de docencia del hospital y ellos me enviaron la documentación que debía cubrir. Después rellené los documentos que pedían en docencia de mi hospital y listo. Además, el hospital ofrece becas para alojarse en viviendas cercanas al hospital reservadas para los scholars internacionales, y también me concedieron una, aunque finalmente no pude realizar la rotación, debido a la pandemia. Posteriormente, en los últimos meses de residencia, solicité una beca de la AEP (“Aprendiendo a Investigar”) y, de esa manera, conseguí finalmente realizar esta estancia en EE.UU. a los pocos meses de acabar la residencia.
3. Una vez iniciada la actividad asistencial, ¿cuál fue tu grado de participación?
En mi caso, la estancia estuvo enfocada en la investigación, con lo que al llegar me incorporé a un proyecto para evaluar la respuesta inmunológica de los niños expuestos a COVID durante el embarazo. En las primeras semanas me formé en las técnicas de laboratorio y pude formar parte de todo el proceso, desde el reclutamiento, obtención y procesamiento de muestras, análisis e interpretación de resultados y, actualmente, estamos trabajando en las publicaciones. Desde el primer momento, me integraron como una más del equipo y pude participar en todos los pasos.
4. ¿Se fijaron unos objetivos docentes preestablecidos antes de tu llegada? ¿Se realizó una evaluación de tu labor al final del mismo?
Antes de mi llegada, los jefes del laboratorio me enviaron información del proyecto al que me iba a incorporar, así como entrenamientos sobre el laboratorio y competencias en el hospital que debía adquirir a mi llegada. Establecimos cuál sería mi papel en el proyecto, así como la posibilidad de incorporarme a todas las sesiones clínicas y a los pases de visita de los pacientes cuando tuviera la oportunidad. De todas formas, a medida que avanzaba el proyecto íbamos estableciendo nuevos objetivos y competencias. La evaluación fue continua y progresiva, no hubo un test específico al final de la estancia.
5. Resume brevemente los conocimientos/habilidades adquiridas:
En el terreno de la investigación, considero que la mayor parte de mis conocimientos actuales los adquirí durante mi estancia allí: trabajo básico de laboratorio (manejo procesamiento de muestras, técnicas, etc.), procesamiento de bases de datos y análisis estadístico, coordinación del proyecto… En cuanto a la asistencia, también fue un contraste aprender cómo funciona el sistema americano y las patologías prevalentes en la zona donde me encontraba. A nivel personal, he conocido grandísimos profesionales de los que he aprendido muchísimo y amigos que me acompañarán en el camino.
6. ¿Cambiarías algo relacionado con tu rotación/fellowship? En caso afirmativo, ¿qué cambiarías?
Aunque tuve la fortuna de poder estar 8 meses, sin duda habría prolongado más mi estancia allí. Como comentaba, tuve mucha suerte de incorporarme al proyecto y formar parte de todas sus fases iniciales, pero debido a eso, justo cuando estábamos en la parte del análisis tuve que volverme y sigo trabajando en ello desde la distancia, todavía en contacto con el equipo, aunque hubiera sido más fácil y enriquecedor acabarlo desde allí. Por otro lado, recomiendo a todo el que vaya, intentar aprender a manejarse con programas estadísticos como R. Yo me inicié un poco tarde y no pude adquirir nociones suficientes para implementarlo de forma autónoma en mis proyectos.
7. Puntúa del 1 al 10 (equivaliendo 1 a una puntuación muy mala y 10 a una puntuación muy buena:
• Enseñanza: 9
• Supervisión: 10
• Grado de aprendizaje: 10
• Puntuación global: 9,5
8. ¿Esta rotación ha cambiado tu práctica médica? ¿Ves posible aplicar dichos conocimientos de regreso en tu hospital o en tu futura práctica profesional?
¡Por supuesto! Desde que llegué no he dejado de incorporar los conocimientos adquiridos en mi día a día. Me apasiona la investigación y, aunque en ese sentido, en España tenemos más limitaciones de las que hay en EE.UU., aquí también tenemos mucho que aportar, y hay que darle el valor y el lugar que se merece entre todos. Considero que las nociones de laboratorio han mejorado sustancialmente mi comunicación con los compañeros de básica al hacer proyectos conjuntos. Además, a nivel asistencial, también intento incorporar en mi día a día, al menos, parte de la metodología de docencia y formación continuada que se inculca allí desde el inicio de la residencia. Por supuesto, mis conocimientos en Infectología Pediátrica también han mejorado, y ver la forma de trabajar en otros hospitales siempre abre la mente y te permite tomar decisiones con más claridad.
9. ¿Pudiste implicarte en alguna actividad más allá de la asistencia (docencia, sesiones clínicas, investigación…)? En caso afirmativo, ¿puedes explicarnos qué tipo de actividad?
La metodología de trabajo fomenta la medicina traslacional, con lo que en mi caso, que iba destinada a trabajar en la parte de investigación, tuve total flexibilidad para formar parte de las labores asistenciales, asistiendo a los pases de visita, sesiones y reuniones clínicas. Del mismo modo, a los compañeros que iban más enfocados a la parte asistencial, también se les motivaba a realizar algún proyecto de investigación durante su rotación.
El sistema estaba planteado, de modo que cada día tenías múltiples sesiones a las que podías asistir (docentes, clínicas, de investigación) y, ocasionalmente, acudían ponentes de otros hospitales a dar sesiones específicas. Dentro del servicio de infecciosas, también había sesiones donde revisábamos cada paciente ingresado y se repasaba algún tema y, en paralelo, había reuniones del grupo de investigación. ¡Definitivamente había más alternativas de las que podías abarcar en un día!